INDEPENDENCE DAY
Para comenzar es necesario decir que a lo largo de la película, la trama poco a poco se va agudizando, y lo que en un primer momento parece como algo imposible (la existencia de alienígenas) al final se ve no solo como algo evidente sino como algo que debería de haberse tenido en cuenta mucho antes de que sucediera la invasión.
A lo largo de la película se narran situaciones muy diversas, tanto situaciones de mucho nerviosismo como situaciones de incredulidad por parte de los habitantes de Estados Unidos.
Todo comienza con una simple señal de radio que supuestamente provenía de la Luna. Trás informar al Pentágono se dan cuenta de que se trata de una nave alienígena que se dirige a la Tierra, la cual se divide en otras más pequeñas para establecerse en las principales ciudades del mundo.
A partir de ese momento y gracias a la información de David Levinson, la señal emitida por las naves desaparecerá en unas siete horas, lo que significa que tenían siete horas para decidir como poder defenderse de estos seres.
En las siguientes secuencias se aprecia como los propios habitantes deciden abandonar sus casas, huyendo de la gran nave que se había colocado encima de toda la ciudad.
David decide con la ayuda de su padre Julius ir a la Casa Blanca y tratar de explicarle al presidente Thomas Whitmore como los alienígenas usan los satélites estadounidenses en contra de ellos mismos.
El presidente decide abandonar la Casa Blanca para mantener el gobierno a salvo y posteriormente los alienígenas reducen a ruinas ciudades como Washintong D.C, Nueva York, Los Ángeles.
Horas después del ataque a las ciudades se crea una comitiva en el Área 51, en la que aparece el protagonista de la película, Steven Hiller, un capitán de la Marina de los Estados Unidos que junto a su escuadrón intentan destruir la nave lanzándole misiles.
En la siguiente secuencia vemos como los cazas alienígenas salen de la propia nave, siendo superiores en número, en capacidad de tiro, etc.
Masacran a la mayoría de pilotos excepto a Steven, quien logra derribar una nave y tras caer en el desierto de Nevada noquea al extraterrestre, llevándolo al Área 51 para que lo estudiaran.
En esta secuencia Steven recibe la ayuda de Rusell Casse, ex-piloto de Vietnam que aseguraba que había sido abducido por extraterrestres, quienes le hicieron multitud de experimentos y de ahí que él supiera las intenciones que ellos tenían.
En la siguiente secuencia Brackish Okun el científico ordena analizar al extraterrestre de inmediato aunque lo que no sabían era que aún seguía vivo, y ataca a todos los médicos que estaban presentes, capturando a Okun y usándolo para comunicarse con los humanos.
El alienígena es asesinado por el Mayor Mitchell y el presidente Whitmore decide atacar con armas nucleares a las naves.
El ataque nuclear fracasa y Hiller se encuentra de nuevo con Tifani y con Dylan.
En la secuencia posterior, David traza un plan y le pide al Mayor Mitchell que le ayude a introducir un virus en la nave nodriza para que los humanos puedan contraatacar, aunque es el propio David el que tiene que ir en la nave alienígena para poder transmitir el virus.
En las últimas secuencias las aviaciones de todo el mundo se disponen a atacar y logran debilitar la nave nodriza aunque no consiguen destruirla por completo, los escuadrones se dan cuenta en ese instante de que la nave se está preparando para lanzar su arma principal por lo que era necesario que uno de sus misiles impactase sobre ella.
Se le encarga a Russel Casse que dispare su misil, pero al fallar el sistema de lanzamiento decide inmolarse destruyendo así la nave completamente.
Todo se inicia con una serie de secuencias en las que la mayoría de la población de la Tierra ni se preocupaba por pensar que existía vida más inteligente que nosotros en el universo, mientras que los individuos de Marte se preparaban para lo que sucedería.
En la siguiente secuencia se ve como un meteorito impacta con la Tierra y Ogilvy decide ir a comprobar lo que realmente era.
Tras comprobar que se trataba de algo parecido a una cápsula que parecía tener algo dentro, avisó a Henderson, para que informase a los medios de lo que estaba sucediendo.
En las siguientes secuencias las personas cercanas al lugar donde se encontraba la cápsula se aglutinaron ya que creían que había seres humanos dentro, algo erróneo de lo que se dieron cuenta cuando de un momento a otro salió de ella unos seres metálicos con tentáculos.
El protagonista huyó del lugar y aunque en un primer momento le tomaron por loco, las autoridades militares comenzaron a prepararse aunque ya era demasiado tarde, la segunda cápsula había aterrizado.
En esta nueva secuencia los ataques militares no valían de nada ya que los marcianos eran totalmente superiores y el protagonista decide dejar a su mujer en un pueblo alejado y posteriormente al volver a Maybury comprobó como un tercer cilindro había llegado también a la Tierra.
El protagonista decide pues refugiarse en una casa junto a un soldado durante unos días, hasta que se marcharon a Leatherhead. Los marcianos seguían destruyendo todo a su paso e incluso él llega a estar a punto de morir al quedarse escondido en un río que por poco es abrasado.
La situación se complicó aún más, aterrizando el cuarto cilindro, y aunque el ejército hacía todo lo que podía, no tenían ninguna posibilidad.
«Esto no es una guerra. No lo ha sido nunca, como no puede haber guerra entre los hombres y las hormigas.»
Por último, su hermano decidió marcharse de Londres y desde su propio barco pudo ver como distintos acorazados de guerra intentaban acabar con los gigantes metálicos.
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